Treinta y tres personas declararán como testigos en el juicio que se iniciará el próximo lunes 16 de septiembre, y en el que se ventilará el homicidio de Alexis Céparo, ocurrido el 21 de enero de 2012 en Cerrito.
Como único imputado llega a juicio Adrián Molaro, de 23 años, a quien se le atribuye haber llegado a la casa de la novia de la víctima, y dispararle a Céparo tres balazos con una Mágnum 44 de su propiedad.
El caso conmocionó a la comunidad de Cerrito, ciudad del departamento Paraná ubicada a 55 kilómetros de la capital provincial. La víctima era futbolista y conducía un programa de radio. Era muy conocido en la ciudad, y había sido compañero de colegio del imputado, durante toda la primaria y secundaria. Su muerte, después de cuatro días de agonía en el hospital San Martín de Paraná, generó aún más consternación entre los pobladores de Cerrito.
Luego del hecho, cuyo móvil tratarán de desentrañar los jueces de la Sala II de la Cámara del Crimen, Molaro huyó de la localidad y estuvo 20 días prófugo.
Buscado por la Policía de Entre Ríos y de provincias vecinas, se entregó después de haber cruzado la frontera con el Paraguay, y regresado a la provincia de Corrientes, donde se asentó en un complejo turístico cercano a Mercedes y comenzó a desarrollar algunas labores como mozo en un restaurante.
Cronograma. Desde Tribunales se informó que para la primera jornada de juicio, en la que se le dará la oportunidad al imputado de declarar para ejercer su defensa, han sido citados cinco testigos.
Cuando declaró ante el juez de Instrucción de Paraná, Elvio Garzón, el 1 de marzo del año pasado, Molaro reconoció su responsabilidad en el ataque a tiros que ocasionaron las heridas mortales a Céparo. Pero añadió que su ex compañero de escuela lo acosaba y hostigaba desde muy pequeño.
En ese momento, el detenido le aseguró al juez de la causa que entre el 20 y 21 de enero de 2012 intentó hablar tres veces con la víctima para pedirle que termine con esa situación, ya que ambos eran grandes y era hora de poner fin a los entredichos. Molaro se defendió y sostuvo que Céparo lo siguió despreciando, y que cuando fue a la casa de la novia de la víctima para conversar, éste lo agredió verbalmente e intentó pegarle, a lo que él respondió extrayendo el arma para dispararle en un brazo.
Una fuente de la Cámara Penal de Paraná explicó que después de la primera jornada del juicio seguirán otras seis, en las que “declaran entre cinco y seis personas por día”. En tanto, los jueces Marcela Davite, Ricardo Bonazzola y Marcela Badano tienen previsto que el miércoles 25 de septiembre se realice la etapa de alegatos.
PARA DESTACARDe todos los testimonios, sólo cinco fueron solicitados por la defensa de Molaro, ejercida por el abogado Marciano Martínez. Entre ellos, se encuentran los padres del imputado. Del resto, la mayoría ha sido citada a instancias de los abogados Ladislao Uzín Olleros y Raúl Masutti, representantes de los padres de Céparo, que son querellantes particulares en la causa.