Personal de una patrulla de la Prefectura Paranacito observó en un camino vecinal de la zona de Ñancay, a unos 20 metros del A° Hondo, un colectivo modificado como furgón.
Los uniformados interceptaron el vehículo para identificar a sus tres ocupantes, instancia en la que preguntaron a los individuos qué hacían en ese lugar.
Los tres respondieron que habían dejado unos bultos en inmediaciones de una casa abandonada, por lo cual la patrulla la comisión se dirigió hacia el lugar señalado, observando una gran cantidad de bultos dispersos, envueltos en bolsas de consorcio y sellados con cinta adhesiva.
Teniendo en cuenta el lugar donde se encontraba el vehículo, se procedió a dar aviso a la Secretaría de turno del Juzgado Federal de C. del Uruguay, a cargo de la doctora Gómez Pinasco, quien ordenó que el vehículo como los ocupantes fueran trasladados hacia la sede de la Prefectura Paranacito.
Ya en la Dependencia se pudo determinar que los bultos se encontraban sellados con cinta, procediendo por orden judicial al secuestro de la mercadería consistente en 118 bultos, la detención de los tres ocupantes del colectivo-furgón y al traslados de los mismos en la mañana de ayer para prestar declaración en el Juzgado Federal uruguayense.
En cuanto al vehículo con la mercadería se lo trajo a la sede de la Dirección General de Aduanas de nuestra ciudad.
Una vez en la Aduana local se procedió al recuento de la mercadería, arrojando como resultado 19.162 prendas de vestir (hombre, mujer y niños), 353 válvulas de automotor (picos de gas) y 209 unidades de accesorios varios (cintos, gorros, etc.), además de 5 bolsas de semillas para césped.
La suma de lo secuestrado -incluido el automotor- asciende 986.964,08 pesos, es decir más de 165.000 dólares.
Las actuaciones judiciales y administrativas quedaron a cargo de la Prefectura Paranacito.
Este procedimiento exitoso que permitió desbaratar un cuantioso contrabando hacia el Uruguay, se suma al realizado la semana pasada por efectivos de la misma Prefectura isleña, en el marco de los intensivos patrullajes tanto fluviales como terrestres por toda la jurisdicción con el objetivo de prevenir maniobras violatoria a la Ley 22.415 (Código Aduanero).