Más de cien efectivos de la Jefatura de Federación y de otros departamentos del norte de Entre Ríos rastrillaron ayer “un alto porcentaje de los campos que rodean a San Jaime”, informó el titular de la departamental, comisario mayor Hugo Castañares, pero no pudieron dar con el paradero de Juan José Pocho Morales. El hombre, dueño de una agencia de quiniela de esa localidad ubicada en el límite de Entre Ríos con Corrientes, salió de su casa el martes en bicicleta para recolectar y cobrar las apuestas de clientes habituales. Alrededor de las 20.30 de ese día fue visto por última vez, y por la reconstrucción de los últimos movimientos que hicieron sus familiares y la Policía, se presume que llevaba unos 3.000 pesos en efectivo.