ORO VERDE.
CENTRO NUCLEAR.
La semana pasada el Iosper adjudicó a la Unión Transitoria de Empresas (UTE) conformada por la constructora Antolín Fernández de Paraná y Mundo Construcciones de Santa Fe, la obra del edificio donde funcionará Centro de Medicina Nuclear y Molecular que se viene planificando desde 2009 y se erigirá en la zona de Oro Verde. Dos fueron los oferentes. La adjudicataria pasó un presupuesto de 45 millones pesos y la que quedó desechada calculó 62 millones.
“La expectativa es que la próxima semana (por la actual) se pueda firmar el contrato y se espera que en 20 días esté finalizado el proyecto según contempla el pliego de la licitación. Las obras comenzarían en abril”, dijo el presidente del Instituto de Obra Social de Entre Ríos (Iosper), Silvio Moreira.
“Es muy importante que no sólo nuestros afiliados y los entrerrianos tengamos un servicio de alto desarrollo en diagnóstico sino que los profesionales se formen y tenga lugar la investigación. Para nosotros es un orgullo ser los impulsores de esto”, dijo Moreira.
FUNCIONAMIENTO. El Centro funcionará bajo la administración de una Fundación que estará conformada, en principio, por la CNEA, el Iosper y el gobierno de Entre Ríos.
El personal técnico y administrativo del Centro será empleado de la Fundación (ni del Estado ni del Iosper). Los fondos para su funcionamiento y las inversiones provendrán del autofinanciamiento. También están contemplados aportes de la CNEA a partir del acceso a créditos internacionales.
CONTRIBUCIONES. Los 45 millones de pesos para la construcción del edificio los aporta la obra social, el gobierno de Entre Ríos cedió por ley el terreno en Oro Verde y la CNEA contribuye con el equipamiento valuado en un monto total cercano a los 10 millones de dólares. “Esta inversión tiene una secuencia en escala. Una vez que se ponen en función los primeros equipos irá creciendo paulatinamente la instalación de otros” explicó Moreira.
DECISIÓN. Hacer un Centro de medicina nuclear y molecular no es una decisión que se pueda tomar a la ligera o basado en principios caprichosos. Implica una considerable inversión en términos económicos y humanos por parte de la obra social de la provincia. Desde esta perspectiva, no estaría fuera de lugar preguntarse por las razones que respaldan la resolución habiendo también otras posibilidades y necesidades.
Al respecto Moreira argumentó que “esto es un proyecto pensado a largo plazo que busca trascender nuestra gestión. Con este Centro queremos insertarnos en un sistema de desarrollo nacional de la salud. En Entre Ríos no hay Facultades de Medicina ni investigación. Nosotros creemos que esta es la veta para desarrollarnos”.
También señaló como una de las razones del proyecto “la necesidad de formación de recursos humanos. El hecho que esté ubicado en Oro Verde favorece a los estudiantes de la Facultad de Ingeniería de la UNER. Con el correr del tiempo se podrán hacer cosas en conjunto entre la CNEA, la universidad, el gobierno y la obra social. Nosotros buscamos ser el nexo entre todas estas instituciones”.
Para comenzar la instalación de este Centro de Medicina Nuclear y Molecular, Entre Ríos debió competir con Mar del Plata, Córdoba y Misiones. Estos distritos también habían pedido a la CNEA un establecimiento de similares características. El proyecto fue evaluado como el mejor para la región en términos prestacionales, formativos e investigativos.
Finalmente, Moreira señaló: “Este es un directorio obrero electo y por lo tanto no somos funcionarios del gobierno provincial pero debo reconocer que cuando le planteamos esta idea al gobernador, éste la abrazó como propia. Nos ha dado la fuerza para que este proyecto se pueda desarrollar en nuestra provincia”.
Características
El centro se construirá en un terreno ubicado en Oro Verde sobre calle Camino de La Cuchilla en el barrio El Triangular. El establecimiento médico tendrá una superficie cubierta de 3.500 metros cuadrados y un frente de 235 metros. Una vez en funcionamiento, el centro contará con los servicios de oncología clínica, quimioterapia, radioterapia, resonador, acelerador, braquioterapia, cámara gama y tomógrafo por emisión de positrones (Pet), entre otros. Asimismo, habrá un área dedicada a docencia e investigación.
En Argentina sólo hay tres instituciones de similares características. Uno en Mendoza y dos en Buenos Aires. En este marco, Moreira valoró que la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) oriente sus acciones al tratamiento de la salud.
“El plazo de ejecución es de 15 meses y el Centro tendría que empezar a funcionar dentro de los primeros 90 días de finalizada la obra. Nuestro sueño es que antes que finalice el 2014 esté operativo”, afirmó el titular del Iosper.