FALTA DE INSUMOS.
QUEJAS DE CLINICAS ENTRERRIANAS.
La Asociación de Clínicas y Sanatorios de Entre Ríos (Acler) denuncia la falta de “insumos médicos básicos”, lo que le imposibilitaría dar una cobertura satisfactoria a pacientes del sistema de salud de la provincia. “La Asociación de Clínicas y Sanatorios de la Provincia de Entre Ríos (ACLER), advierte a las autoridades de Salud Pública de la Provincia, a las Obra Sociales y a la ciudadanía en general, la emergencia que atraviesan los prestadores sanatoriales que deben afrontar la falta de insumos médicos básicos para el correcto tratamiento de los pacientes”, dice la entidad mediante un comunicado de prensa. No es la primera vez que ocurre una situación de este tipo. En los últimos tres años han sido cíclicas las situaciones de emergencia de las clínicas de todos el país, derivadas de las restricciones de las importaciones y también por la escalada del dólar. En 2012, cuando todavía Guillermo Moreno estaba al frente de la Secretaría de Comercio Interior, las clínicas hicieron público su malestar por la imposibilidad de acceder a insumos básicos, como jeringas, guantes descartables, broncodilatadores en aerosol y repuestos para equipos de prácticas de diagnóstico médico. Entonces, la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados (Adecra), hicieron público su malestar por las dificultades para el acceso a ese tipo de insumos, apunta Entre Ríos Ahora.
También en septiembre último se conoció un informe que dio cuenta de la afectación al sector de la salud derivado de la política de restricción de importaciones. Entonces se habló de falta de equipos, instrumental, insumos y repuestos por las demoras de la Secretaría de Comercio Interior en aprobar las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI).
Según un relevamiento de la Cámara de Importadores de la Argentina (CIRA), publicado por El Cronista, en muchas clínicas la situación es crítica.
Entre los productos que faltan, los más severos se vinculan con tratamientos oncológicos, ya que se trata de material utilizado para la detección de mielomas, el análisis de distintos tipos de carcinomas y neoplasias y la evaluación de la eficacia de sus respectivos tratamientos. Se trata de reactivos e insumos para instrumental ya instalado en una docena de hospitales nacionales.
Estos faltantes están perjudicando las áreas de oncología y hematología de los hospitales de Pediatría Juan Garrahan, Ricardo Gutiérrez y Sor María Ludovica de La Plata; el Cosme Argerich, HIGA Presidente Perón, HIGA Evita de Lanús, Tornú, Penna de Bahía Blanca y el Ramos Mejía. También afecta al Instituto Roffo, la Unidad Milstein (ex hospital Francés) y el Sanatorio Julio Méndez, entre otros tantos. “No se encuentran reemplazos de esta línea de productos franceses en nuestro país y son muy pocos a nivel mundial quienes pueden abastecerlos”, se quejó el importador.
También están demoradas las importaciones de películas destinadas a realizar radiografías y mamografías, análogas y digitales, así como también relevadores y fijadores (químicos) de estas películas. De estos productos, entre el 60 y el 70% se destinan al abastecimiento de centros de salud públicos, mientras que el resto es para los privados. Faltan, además, software y programas de aplicación, así como también reactivos para pesquisas neonatales y prenatales y material plástico para laboratorios.