EL FENOMENO DEL NIÑO.

Con presencia del fenómeno climático del "Niño" tendremos una primavera lluviosa y está previsto que este fenómeno sea fuerte, con la probabilidad de que esa fase dure hasta el próximo verano.

Desde el Servicio Meteorológico Nacional ratificaron que la primavera que comenzó tendrá registros de lluvia y temperaturas "levemente superiores a las normales para este período del año", aseguró la meteoróloga Cindy Fernández.

Al respecto, precisó que en la provincia de Entre Ríos, sur de Corrientes, norte y este de Buenos Aires, centro y norte de Santa Fe, norte de Santiago del Estero, centro y oeste de Chaco y centro y oeste de Formosa se espera que la temperatura sea superior a la normal para el trimestre comprendido entre septiembre y noviembre; meses en lo que el registro habitual es de entre 14 y 21 grados de temperatura máxima. En tanto, con los caudales de lluvia sucederá lo mismo: serán superiores a los registros históricos de este trimestre, cuando los índices oscilan entre 69 y 125 milímetros mensuales.

"Debido al Niño se espera que la temperatura y las precipitaciones sean levemente superiores a las normales y no se descarta que existan eventos de lluvia muy fuerte que podrían provocar una anegación temporal", anticipó la meteoróloga Cindy Fernández, confirmando que cuando finalice el trimestre el promedio las lluvias y temperaturas en toda esta región serán superiores.

Los pronósticos que se vienen realizando desde el invierno dan cuenta de un fuerte efecto en toda esta región de la Corriente del Niño. De hecho, en agosto se triplicaron los valores medios de lluvia, marcando la magnitud del fenómeno.
"Dado los acontecimientos se está dando lo que se había pronosticado para el trimestre, una situación en la cual toda la región está sometida a temperaturas más altas de lo usual y lluvias normales o por encima de los normal, que es lo que se está dando desde agosto", ratificó por su parte el ingeniero Ignacio Cristina, del Centro de Informaciones Meteorológicas de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas de la Universidad Nacional del Litoral.

Señaló que el trimestre que va desde junio hasta agosto es un período con pocas precipitaciones, alcanzando un promedio mensual del orden de los 23,1 milímetros; sin embargo, sólo el mes pasado cayeron 89 milímetros, triplicando el valor de la media.
"Fueron lluvias importantes y si asociamos este dato con las perspectivas del Servicio Meteorológico Nacional, los pronósticos anticipan más lluvias de las habituales y temperaturas más altas de las que corresponden a este momento del año", coincidió.
De acuerdo a ese panorama, es de esperar que a medida que pasen los meses la lluvia se vaya incrementando, desde mediados de octubre hasta noviembre, con períodos más lluviosos. "No hay que ser alarmista, la primavera siempre se presenta como una temporada de lluvia, que en esta región comienza a mediados de septiembre y se extiende hasta marzo o abril, siendo los meses más lluviosos del año