Newell's fabricó este jueves una importante victoria en Rosario por 3-1 sobre Deportivo Lara de Venezuela, que lo dejó transitoriamente como líder del Grupo 7 de la Copa Libertadores y lo dejó a un paso de los octavos de final.
El conjunto de Gerardo Martino dominó a su antojo el primer tiempo, aunque tuvo algunas distracciones que les permitieron a los venezolanos llegar de forma esporádica. No obstante, en la mayor parte del tiempo trabajó muy bien en tres cuartos de cancha con Martín Tonso, Maximiliano Rodríguez e Ignacio Scocco.
Maxi fabricó la primera gran jugada pero Tonso fue anticipado por el arquero Allan Liebeskind. Y ya a los tres minutos la Lepra fue a fondo cuando Tonso reapareció por derecha y habilitó al medio a Pablo Pérez, quien le entró mal al balón pero le salió una definición bárbara por sobre el cuerpo del guardameta.
Luego, el uno le sacó un mano a mano a Scocco y Maxi volvió a combinar con Tonso quien, sin arquero, quiso asegurar la conquista y remató afuera. En el medio, un descuido permitió que Aquiles Ocanto quedara cara a cara con Nahuel Guzmán pero definiera afuera.
Por último, a los 42, Scocco recibió un pase en profundidad por derecha y sacó un delicioso tiro alto y al segundo palo para estirar diferencias antes del descanso. Después de él, continuó el monólogo del anfitrión, con un Tonso endemoniado que primero exigió a Liebeskind y después amenazó con un disparo alto y con un intento desviado de Víctor Figueroa.
Pero a los 33 minutos, en su única llegada del período, los venezolanos sorprendieron a propios y extraños. En una contra, Ocanto envió un centro desde la derecha y el ingresado Edgar Pérez Greco anticipó a Santiago Vergini con un tiro alto y potente que desactivó la reacción de Guzmán.
Sin embargo, el descuento no logró incitar a la visita a crear más chances serias de peligro: enseguida, su guardameta debió anticipar a Scocco en el corazón del área y, a los 43, el mismo Nacho eludió en velocidad a cuatro rivales y disparó bajo y a la derecha de Liebeskind para cerrar una noche redonda tanto en lo personal como en lo colectivo.
Newell's sonríe y palpita la clasificación