A partir del 13 de junio se aplicará un plan piloto en la cabecera del puente Salto- Concordia donde gendarmes argentinos controlarán las salidas de viajeros de Uruguay. El plan también habilita que, en las cabeceras uruguayas de los puentes Fray Bentos-Gualeguaychú y Paysandú-Colón, los controles sean realizados por policías. En lugar de dos migraciones trabajando juntas, el nuevo sistema informático permitirá a los gendarmes contar con informaciones de personas tanto de Uruguay como de Argentina. En Salto, a poca distancia de los gendarmes, se apostarán policías uruguayos, quienes asesorarán a los efectivos argentinos en materia de migración de menores o detendrán a un viajero si está requerido por la Justicia uruguaya. En lugar de dos migraciones trabajando "codo a codo", el nuevo sistema informático permitirá a los gendarmes contar con informaciones de personas tanto de Uruguay como de Argentina. El programa es la implementación de un acuerdo firmado en diciembre del año pasado por las direcciones de migraciones de Uruguay y Argentina titulado "Reconocimiento Recíproco de Competencias".

El subdirector de Migración de uruguay, Enrique Loureiro, dijo a El País que se trata de una experiencia piloto que luego se extenderá a las cabeceras de los puentes Fray Bentos y Paysandú.

El sindicato de Migración cuestiona el acuerdo por considerar que pone en riesgo sus fuentes laborales y porque imposibilita que la Justicia uruguaya pueda responsabilizar a un gendarme por la fuga de un requerido en Uruguay.