Juventud Unida le ganó 1 a 0 a Chaco For Ever, en el estadio Municipal de Gualeguaychú, en el marco de la primera final por el ascenso al Torneo Argentino A de fútbol. El único gol del partido lo anotó Andrés Erpen, a los 38 minutos de la primera parte, cuando clavó un derechazo al ángulo del arquero Hernán Panero, que nada pudo hacer, y que a la postre le daría los tres puntos a su equipo. El elenco del sur entrerriano fue dominador de las acciones y se quedó con una victoria por demás justa frente a un gran marco de público que se dio cita en la cancha (más de 4500 personas alentaron al elenco que dirige técnicamente Norberto Acosta). Dentro de siete días ambas instituciones volverán a verse las caras y el Juve intentará lograr lo que viene buscando desde el año pasado, cuando arrancó la temporada, subir a la tercera divisional del fútbol argentino. Con gran intensidad comenzó a jugarse esta primera final. No habían pasado cinco minutos cuando los dos equipos habían generado situaciones de gol. La primera fue para el Albiceleste en una acción de pelota parada, Iván Bonzi mandó la pelota al área en donde ganó Cristian Wenrly y con un cabezazo estuvo muy cerca ya que la pelota pegó en la parte posterior de la red.
En la siguiente acción el que apareció en el área Hugo Serravalle quien ingresó en el área y cuando quiso definir apareció Emilio Rébora con una gran tapada para salvar a su arco.
Los minutos pasaron y los dirigidos por Norberto Acosta comenzaron a tomar el control del balón, aunque sin llegar a inquietar a Hernán Panero. Como en todos los encuentros, Cristian Fornillo por derecha y Francisco Pereyra por izquierda se mostraron como salidas permanentes buscando asociarse a Iván Bonzi quien en los primeros minutos se mostró impreciso.
Chaco For Ever con la habilidad de Serravalle en ataque y la movilidad de Ortega por izquierda mantuvo en aviso al fondo local que se mostró sin fisuras y sacó cada pelota que se aproximaba al arco de Emilio Rébora.
Pasada la media hora Juventud comenzó a presionar más cerca del área de Panero y a acorralar a los chaqueños. Juan José Weissen por derecha mandó un centro que se fue cerrando lo que obligó a una fenomenal atajada de Panero que se esforzó para mandarla al corner. De ese tiro de esquina vino el centro y el cabezazo de Erpen que pasó muy cerca del palo cuando todos gritaban el gol.
Era un aviso de lo que se venía porque en la siguiente acción el Albiceleste armó una gran jugada para el primer gol del partido. Francisco Pereyra la mandó al área, Fornillo la bajó de cabeza para Erpen que la paró de pecho y la clavó en el ángulo para el éxtasis de las 4500 personas que colmaron el estadio cuando se jugaban 38 minutos.
El equipo visitante sintió el impacto y Juventud Unida lo tuvo contra las cuerdas por lo que casi llegó el segundo con un remate de Fornillo que pasó muy cerca del travesaño.
En el complemento la visita intentó adelantarse y presionar más arriba pero el que arrimó peligro fue Juventud con una entrada de Andrés Erpen que se desvió en Silva y se fue al tiro de esquina. Con el correr de los minutos, el local aflojó la presión que impuso desde la etapa inicial y Chaco casi llegó a la igualdad con un remate bombeado de Roberto González que en forma magistral y con una mano la mandó al tiro de esquina.
Juventud pasado ese sofocón volvió a tomar el control del partido pero le costaba generar situaciones claras de gol. Sobre el final Acosta mandó a cancha a Mauricio Germi buscando darle mayor velocidad al ataque pero Chaco se cerró bien en defensa y finalmente el conjunto Decano se tuvo que conformar con un gol de diferencia.