River venció por 1 a 0 al Sanfrecce Hiroshima de China en la semifinal del Mundial de Clubes y ahora esperará por el poderoso Barcelona de España o del ignoto Guangzhou chino. El único tanto del partido lo anotó Lucas Alario, a los 27 minutos del segundo tiempo, luego de aprovechar de cabeza una floja respuesta del arquero rival. El equipo estuvo lejos de su mejor versión, de hecho debió sortear varios momentos de zozobra ante un débil rival y si no fuera por la figura del golero Marcelo Baravero, la historia habría sido otra. A pesar de todo esto, al equipo que dirige técnicamente Marcelo Gallardo le alcanzó para sortear a los asiáticos, cumplir con lo que marcaban los pronósticos e instalarse en el cotejo decisivo del certamen que se juega en Japón.