Dos jóvenes delincuentes asaltaron en horas de la noche de este jueves un comercio ubicado en bulevar Montoneras 218, del rubro mercería y regalería, donde entraron con sus rostros cubiertos y se llevaron el dinero de la caja que le dio la dueña ante las amenazas.

Si bien no se obtuvo información oficial respecto de lo sucedido, se pudo saber que inmediatamente de ocurrido el atraco, la Policía fue alertada y se montó un rápido operativo en la zona.

Personal del Comando y efectivos de Investigaciones acudieron al lugar y estos últimos lograron interceptar a un joven, descubriendo que había ocultado un arma de fuego en el pilar del medidor de una vivienda ubicada en calle Lucilo López, entre Sal Lorenzo y Lucas Piris, en tanto que el cómplice escapó en dirección al sur, ocultándose en una precaria vivienda.

La sorpresa fue descubrir que el ladrón atrapado solo tiene 13 años y al parecer era asiduo concurrente a la casa donde encontraron el arma, donde viviría solo un menor y –según vecinos- se había convertido en un lugar de encuentro o “juntadero”.

Durante el procedimiento, numerosos vecinos se acercaron para ver qué pasaba, entre ellos la madre del menor aprehendido, quien lejos de molestarse con la Policía esperaba que la Justicia se lo entregara para castigarlo.

Momentos más tarde, el personal de Investigaciones, con los datos recabados, solicitó una orden de allanamiento, logrando así ingresar en una vivienda cercana, donde logró la detención de un joven mayor de edad, que sería el cómplice del menor, el cual quedó detenido, en tanto que el menor de 13 años, fue llevado a la comisaría y luego restituido a su familia.